jueves, 10 de diciembre de 2009

El viaje de tu vida: decide lo que quieres.



Como el asunto de fijar objetivos no es tan sencillo como parece, vamos a ahondar algo más en el tema.
Una vez que te has decidido a tomar las riendas de tu vida, debes definir que quieres ser, hacer y tener en tu vida. Que definan ¿Qué quieres conseguir en tu vida?, ¿qué quieres experimentar a lo largo de tu vida?, ¿qué posesiones quieres tener? y ¿con quién quieres hacer el viaje?.

Todas estas preguntas siempre han venido marcadas o condicionadas por otros. Desde chiquititos nos han dicho que podemos y sobre todo, que no podremos hacer (eso no se toca, eso no se hace, eso no se dice…) y el subconsciente ha asumido que no todo es posible en la vida, que el dinero no cae del cielo, que hay que hacer lo que le manden, etc. etc.
Estos condicionantes, que tanto daño hacen al individuo a lo largo de su vida, nos hacen coartarnos en nuestras metas, incluso a asumir las metas y sueños de otros.
Debes fijar tus propios objetivos, y no ponerles límites, por muy irreales que parezcan a priori. No te conformes con menos de lo que quieres. De resignados y conformistas está el mundo lleno. Se ambicioso en tus sueños.
Es tan sencillo como esto: si pido 10 y todo sale bien…consigo 10. Si pido 100 y sale regular…consigo 50 (muchísimo más de 10, ¿verdad?). Así que pide y sueña.

A parte de los condicionantes anteriores, la educación, la sociedad, etc., hay unas trabas peligrosas que nos auto-imponemos a la hora de fijarnos objetivos. El miedo al fracaso, el miedo al éxito, el miedo al cambio. Uno muy importante es el miedo a ganarse la vida con nuestro sueño. Muchos de nuestros objetivos se ven truncados porque con ellos pensamos que no nos ganaremos la vida. Pero si analizas bien a los triunfadores, te darás cuenta de que todos viven de lo que les gusta. Hacen apasionadamente lo que les gusta. Si haces algo con pasión, con interés, acabas ganándote la vida con ello.
Otro aspecto negativo es ese grupo de personas, que siempre, por pesimismo, por envidias, por ser muy listos o ganas de amargar, te dicen que no hagas cosas y te desaniman en tus objetivos. Muchas veces sin mala intención, creen que te están ayudando. No dejes que nadie te convenza de cambiar de decisión.

A la hora de fijar objetivos, una forma sencilla es hacer una lista de “quiero”.
Papel y boli, por favor. Elabora una lista de 25 acciones que te gustaría hacer, 25 cosas que te gustaría tener y 25 ideas de lo que quieres ser a lo largo de tu vida.
Verás que a parte de no ser nada sencillo, empezarás poniendo cosas superficiales (quiero un mercedes, quiero ir de viaje a china…), para acabar siendo algo más profundo (quiero respeto, quiero sentirme querido, quiero ser reconocido profesionalmente…)

Una forma efectiva de saber que quieres…es imaginando tu vida en un futuro, visualizando tu vida ideal: en qué casa vives (descríbela con todo lujo de detalles), qué coche tienes, qué tipo de trabajo tienes, cuánto dinero ganas al año, cuanto tiempo dedicas al tiempo libre, que forma física tienes, cómo es tu alimentación, qué actividades haces, que aficiones practicas, qué relación tienes con familia y amigos, qué cosas haces en comunidad, sigues mejorando personal y profesionalmente, dónde viajas, en qué medios y con quién…

Sólo el mero hecho de pensar y escribir lo que quieres, ya es un estupendo paso para encaminarte hacia tus objetivos. Cuidado, es adictivo, una vez que empiezas a tener objetivos… ¡no podrás parar!

La fijación de objetivos es como el GPS de un coche. En cuanto sabes dónde estás y dónde quieres llegar, tu mente se centra constantemente en ello y te indica el camino.

¡Feliz viaje!

viernes, 13 de noviembre de 2009

El viaje de tu vida: fijación de objetivos.


A nadie se le escapa, que en todo viaje…hay que saber dónde se está y a dónde queremos llegar.
Entiendo que aprecian la importancia de algo tan sumamente “sencillo” de entender y tan complicado en la realidad.
Aún así, parece que hay mucha gente que no sabe ni donde está, ni donde quiere llegar en la vida.

Muchos tenemos sueños, objetivos, metas en la vida. (Otros aún no se han parado a pensarlo: o desconocen su utilidad, o no saben o tienen miedo al fracaso) La fijación de esas metas muchas veces es por casualidad, avatares de la vida, objetivos impuestos, copiados de padres, amigos, terceras personas …Los objetivos deben ser personales y meditados.

El mero hecho de perseguir sus sueños le hace la vida más interesante, cobra utilidad, finalidad, sentido.
El motivo por el que nos vamos a marcar metas y objetivos es para dirigir nuestra vida y seguir la dirección en la que nos gustaría ir. Queda claro pues, que si fijo unos objetivos, los persigo y los consigo, soy el director de mi destino, el director de mi propia vida.
Anotar la dirección que te gustaría tomar en la vida le da mayor claridad mental. Tener objetivos claros, hace que todos sus sentidos y sus actos vayan encaminados irremediablemente hacia esos objetivos.

La idea aquí, es ser sinceros, mirar a nuestro interior y plasmar cuales son nuestras inquietudes, nuestros sueños, nuestros deseos en la vida. Cuando uno se para seriamente a ver que quiere en la vida, qué cosas le hacen sentirse bien, en qué encuentra la felicidad, se da cuenta que no es tarea sencilla, pero definirlo es bastante gratificante.

Deje volar su imaginación, olvídese de trabas familiares, sociales, laborales. Plasme en un papel qué quiere. Tanto en su vida personal, como en su vida laboral o empresarial. No se pregunte como conseguir ese sueño, le condicionará escribirlo. Plasme todo lo que se le ocurra, ya veremos más adelante como va a conseguir ese objetivo.

Algunas reglas básicas para fijar objetivos:
.- Para fijar sus metas principales, es mejor acudir al interior, acudir a los valores personales, sus convicciones y sus expectativas.
.- Claridad. Concreción máxima. Defina lo más ampliamente posible qué quiere.
.- Mensurable, cuantificable.
.- Limitado en el tiempo.
.- Implican ambición. Algo que a bote pronto, no es nada sencillo de conseguir.

Como ejemplo….tener como objetivo “ser rico”, es muy vago, inconcreto. Si ese es nuestro objetivo, deberíamos decir: “quiero tener 1 millón de euros en efectivo en el banco a 31 de diciembre de 2020”. De este modo, el objetivo es totalmente claro, cuantificable y fijado en el tiempo, por tanto podremos llevar un seguimiento, un plan de acción y sobre todo, sabremos cuando lo hemos logrado.

Cada persona es un mundo, así que cada cual tendrá sus objetivos en la vida …y lo mejor de todo, esos objetivos van cambiando con la edad, con la experiencia, con el pasar de la vida. Así que este proceso de pensar, definir y analizar los objetivos debe ser ya constante, para ir corrigiendo el rumbo que se quiere tomar.

Observando en el interior de uno, aparecerán los objetivos principales que uno quiere conseguir en la vida, y le aseguro, que dista mucho de los objetivos que a primera vista se nos ocurren: dinero, una casa más grande, algún viaje exótico, un deportivo… si se piensa un poquito en profundidad, los objetivos son mucho más profundos, más cercanos a la verdadera felicidad y a las cosas importantes de la vida.

A parte de fijar algún objetivo principal, podemos y debemos fijar sub-objetivos. Son paradas intermedias, que nos llenan de satisfacción, que aportan motivación al ir consiguiéndolos.
Siempre deben ir en la línea del objetivo principal, para que no nos retire mucho del camino marcado.

Como ejemplo: si el objetivo de alguien es “ser el director general de una gran compañía farmacéutica en 2020”, como objetivos intermedios, deberá necesariamente incluir sub-objetivos como: “acabar la licenciatura de Ciencias Económicas”, “acabar un master en marketing farmacéutico en una buena escuela de negocios”, “ser bilingüe en inglés”, “conseguir un trabajo en la empresa farmacéutica X”, etc.
Van todos encaminados a conseguir el objetivo principal. Ir esforzándose en lograr estos sub-objetivos, hace el camino más llevadero, más motivado y sintiéndose realizado y en el camino correcto.

El mero hecho de fijarnos objetivos consigue dos hechos beneficiosos, encaminados a su consecución:
.- Pensar y analizar qué queremos se convierte en un proceso metódico y recurrente, que ya no podremos dejar de hacer a lo largo de nuestra vida. Sobre todo si nos esforzamos y obtenemos los resultados esperados.
.- Hace que pongamos todos los sentidos, de forma inconsciente, a la tarea de perseguir esos objetivos.

Como ejemplo simplista: cuando de repente nos gusta un coche que nos gustaría comprar, empezamos de forma “casual” a verlo por todas partes. En anuncios de televisión, en prensa, por la calle lo vemos pasar… no es que sea casualidad, siempre estuvieron ahí, pero ahora mi mente, tiene por objetivo ese coche, y por tanto todos los sentidos hacen que nos fijemos en ese coche. Antes ni nos fijábamos, aunque estuviese ahí.
Todos los sentidos están centrados en la consecución de sus objetivos.

Si no sabe por donde empezar, acuda a los dichos populares, que dicen que “la felicidad es salud, dinero y amor”. Cómo ejercicio práctico recomiendo hacer un listado de objetivos:
.- Un objetivo principal en cada una de esas áreas.
.- Un par de sub-objetivos para cada objetivo principal.

Más adelante definiremos planes de acción para conseguir esos objetivos.

Feliz viaje!

domingo, 1 de noviembre de 2009

01. Reflexiones

Hace tiempo leí una historia...y como muchas de las historias...tiene un aprendizaje.

Espero os guste y saqueis alguna enseñanza.



Un grupo de estudiantes estudiaba las Siete Maravillas del Mundo.
El profesor les solicitó una lista personal de las que ellos consideraban las Siete Maravillas del Mundo.
A pesar de algunos desacuerdos, la mayoría votó por lo siguiente:

.-Las Pirámides de Egipto.
.-El Taj Mahal.
.-El Coliseo de Roma.
.-Chichén Itzá.
.-Machu Pichu.
.-La Basílica de San Pedro.
.-La Muralla China.

Mientras se hacía la votación el maestro notó, que una estudiante permanecía callada y no había entregado aún su lista. Así que le preguntó si tenía problema para terminar de hacer su elección.
La muchacha tímidamente respondió. "Si. Me cuesta decidirme entre tantas maravillas"


El maestro dijo: "Bueno, dinos lo que has escrito y tal vez podamos ayudarte".
La muchacha titubeo, y después leyó su lista.



"Creo que las Siete Maravillas del Mundo son:

.-Poder tocar.
.-Poder saborear.
.-Poder ver.
.-Poder escuchar.
.-Poder sentir.
.-Poder reír.
.-Y... Poder amar.


Al terminar, toda la clase quedó en un silencio.


Es muy sencillo para todos poder ver como "maravillas" las cosas materiales, las cosas asombrosas..., y normalmente pasan desapercibidas las maravillas que son sencillamente "comunes" y que al fin y al cabo son las que nos dan la felicidad.


Centramos nuestras vidas en cosas materiales...descuidando las cosas sencillas, los gestos cotidianos...que nos dan el bienestar y la felicidad.

¡Espero que hoy te acuerdes de aquellas cosas que son realmente Maravillosas!

viernes, 23 de octubre de 2009

Bienvenidos y feliz viaje.

Empiezo este blog con tres cosas claras...


La primera es su objetivo: quiero que nos ayude a reflexionar y a mejorar personalmente para ser más felices.
La segunda es que tiene que ser breve, clara y directa, expresada de forma didáctica y que resulte práctica, aplicable por cualquiera al día a día.
La tercera es que expondremos temas muy variados, reflexiones sobre la vida, cómo se puede mejorar nuestro día a día, teniendo en cuenta cosas tan simples o tan complejas como son los sentimientos, la forma de ver la vida, la forma de encarar y afrontar los problemas, las relaciones con los demás, la empatía, la autoestima, la motivación personal, el amor propio, la intuición….

En estos artículos les invito a soñar, a ser los dueños de su propio destino, a creer en si mismos y a darse cuenta de que pueden llegar hasta donde quieran llegar, todo es cuestión de la forma de ver la vida, es cuestión de actitud: actitud positiva.



Como objetivo último, todos queremos la felicidad. En una encuesta el 100% de las personas dirá que quiere ser feliz…pero muy pocos sabrán que es ni como se consigue. Y al ser preguntados, muy pocos, estarán haciendo algo por conseguirla. Con llegar a fin de mes ya tenemos bastante.
La felicidad en la vida, al fin y al cabo es disfrutar de ella, del camino, de los detalles, grandes y pequeños, del día a día. No es conseguir grandes objetivos, ni conseguir cosas materiales.
Si nos paramos 5 minutos a pensar que cosas nos da la felicidad…(recomiendo siempre pensar con lápiz y papel para anotar las cositas importantes), observaremos que son las cosas más pequeñas, que no cuestan nada: un abrazo, un beso de un ser querido, un te quiero, un paseo por la playa, una tarde de charla con amigos, un asadero un domingo, la lectura de un buen libro, una palabra de agradecimiento, … nos damos cuenta que la felicidad no es otra cosa que la suma de pequeños momentos felices que nos da la vida.

Así pues amigos…parece mentira lo sencillo que tenemos al alcance de la mano ser felices y nos ocupamos de otros temas más materiales, que creemos más importantes…pensando que serán los que nos de la felicidad…dejando de lado lo realmente importante, dejando de disfrutar activamente todos los días y dejando de hacer las cosas que nos aportan más momentos felices. Nos volcamos en el trabajo, en conseguir cosas materiales, en llegar a fin de mes…. Y nos olvidamos de sonreír, de dar las gracias, de hacer caricias y de decir te quiero. Créanme, es más rentable disfrutar del camino hacia el objetivo fijado, que aunque no se consiga, la experiencia habrá merecido la pena y nos habrá enriquecido.

Creo firmemente que la vida es un viaje y en esta sección estamos para aprender a hacerlo más interesante, más próspero y más feliz. La vida, como todo viaje, tiene un punto de partida y un destino. Parece absurdo plantearlo….pero se ha parado a saber quién es, qué quiere en su vida, qué quiere hacer, qué quiere ser, a dónde quiere llegar y con quién realizar el viaje? (les propongo un ejercicio práctico. Les encomiendo cojan lápiz y papel, y se dediquen a plasmar respuesta a esas “sencillas” preguntas.) Veremos como fijar objetivos, como planificar y como conseguirlos. Veremos que los sueños se hacen realidad, con un poco de esfuerzo, planificación y buena actitud.

Todo viaje necesita o debiera tener un mínimo estudio preliminar, de cuál es el destino, qué variedad de rutas puedo seguir para alcanzarlo, con que medios personales, materiales y económicos cuento para llegar al destino, quien o quienes van a acompañarme en el viaje.


Como decimos, la vida es un viaje, y como tal debemos:
.- Fijar un destino (objetivo personal, laboral, de pareja., etc.), saber a dónde quiero llegar es fundamental para saber hacia donde he de remar, cual es el camino más corto y que necesito para el viaje.
.- Fijar paradas intermedias (pequeñas metas para descansar, para motivarnos, alegrarnos), Todo objetivo tiene pequeños hitos que hacen más llevadero el camino hacia el objetivo final, que nos impulsan, nos motivan y corroboran que vamos en el buen camino.
.- Conocer los medios personales de los que disponemos (actitud y aptitud). Conocer como somos; nuestras capacidades, fortalezas, debilidades, limitaciones, (autoestima, empatía, asertividad, amor propio, carácter, confianza, intuición, etc.) nos ayuda a saber nuestros límites y en que debo mejorar y que debo resaltar.
Así como importante es conocer las aptitudes que tengo y que necesito, para alcanzar esos objetivos (en qué soy bueno, de qué recursos materiales y económicos dispongo, que formación tengo y cual requiero para mis objetivos).
.- También debemos determinar quien nos acompañará en el viaje y tener en cuenta el entorno (viajaremos solos, en pareja. Conocer las relaciones con los demás, la importancia de la gratitud, el compartir, la amistad, el sentirse amado y parte de algo).

Con el único fin de que quede claro que cada cual es dueño de su destino y que puede sin lugar a dudas dirigir su propia vida. Es cuestión de actitud.

En este blog iremos desgranando detalladamente cada una de estas partes importantes que conforman nuestro yo, para conseguir la felicidad.

Bienvenidos y feliz viaje.